¿Aún no sabes lo que es twitter? ¡No me lo puedo creer! Se trata de una red social, con la particularidad de que está basada en "microblogging", o publicación de pequeños mensajes de texto en la red. Nació en 2006, aunque en los últimos meses se ha puesto más de moda que nunca. Se estima que alrededor del mundo hay unos 200 millones de usuarios, que generan 65 millones de mensajes al día.
Estos mensajes, más conocidos como tweets (pío, gorjeo), constan de un máximo de 140 carácteres, es decir, la misma longitud de los mensajes de texto de los móviles (sms), a los que los jóvenes están tan acostumbrados.
Los mensajes se publican, de manera que cualquier usuario de internet puede leerlos (a diferencia de otras redes sociales, en las que hay que crearse un perfil, y a menudo estar conectado con la persona que publica los contenidos para poder verlos).
Si quieres suscribirte a los mensajes de alguien, debes hacerte "follower" suyo, y cada vez que publique algo estarás enterado.
Los mensajes suelen llevar ciertas marcas, que conviene conocer para no quedar atrapado en esta red social. Cuando quieres compartir un mensaje de alguien, haces "retweet" de él, quedando marcado como RT. Si quieres contestar a alguien, debes escribir @ seguida de su nombre de usuario. Si quieres etiquetar tu mensaje, para que forme parte de una categoría concreta, debes usar "hashtags", o palabras clave, siempre seguidas de una #. Estas etiquetas son muy útiles a la hora de hacer búsquedas de mensajes sobre un tema concreto. Nacen espontáneamente, unas triunfan y son las que terminan marcando un tema, y otras caen en el olvido.
En 2009 se hizo un estudio sobre el contenido de los tweets, basándose en 2000 mensajes escogidos al azar. El resultado fue:
- 40% de noticias
- 38% de conversaciones
- 9% de retweets (RT-mensajes repetidos)
- 6% de autopromoción
- 4% de spam
- 4% de palabras sin sentido
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