Detector de fracasados
P: ¿Tú a qué te dedicas?
O: ¿Yo? Soy detector de fracasados.
P: ¿En serio? ¡Yo también!
O: ¿En serio? ¡Qué casualidad!
P: ¿A qué mola?
O: ¿El qué mola?
P: ¡El trabajo!
O: Bueno... La verdad es que es bastante reconfortante.
P: ¡Eso mismo digo yo! Encontrar fracasados, hacerles ver la mierda de vida que llevan, reírse de ellos un rato... darles una paliza y borrarlos del mapa.
O: (mirada incrédula)
P: (mirada de asombro) ¿Por qué me miras así?
O: Yo no les doy palizas... Ni les borro del mapa.
P: Ah, ¿no?
O: No.
P: ¿Y eso?
O: ...
P: ¿No les das palizas?
O: No.
P: ¿Ni te ríes de ellos?
O: Pues no.
P: ¿Entonces?
O: Pues simplemente hablo con ellos... Les hago que piensen, que se hagan preguntas, que se replanteen las cosas... Les hago que cambien.
P: Les haces que piensen... (mirada pensativa)
O: (sonrisa de satisfacción)
P: (mirada incrédula)
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2 comentarios:
Ay! que recuerdos!. Prefería con mucho los perritos piloto a los putos megáfonos esos...
Pero como el tux que vimos que llevaba alguien en las fiestas de alcalá y no encontramos en ninguna tómbola, ninguno.
Jajaja. Gux, creo que tienes el punto de mira un poco desviao :P
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