Cepeda de la Mora

Esta mañana he estado hablando con cierta personaja que todos conocéis de casas rurales, y ha sido inevitable que vinieran a mi cabecita recuerdos de las veces que he estado en una. Lo mismo se me olvida alguna... pero yo diría que han sido tres. La más reciente en La Frontera (Cuenca), la anterior en Santa Marina (Cudillero, Asturias) y la primera en Cepeda de la Mora (Ávila).

Y bueno, me he puesto nostálgico y he estado buscando por la red fotos de aquella primera casa rural, a la que fui con gente que sigue aún a mi lado, con gente a la que ahora veo poquito y con gente a la que no veo nunca. De esto debe hacer ya como cuatro añitos o así...

La casa
A esa puerta se acercaba una perrilla para que le diéramos de comer... aunque algunos preferían darle de beber :S Junto enfrente de la casa pasamos más de un rato dándole patadas al balón. Los coches estaban por ahí cerca aparcados.

Salón
Si no recuerdo mal los muebles estaban al revés que en la foto... En la pared del fondo estaba el sofá, y la mesa aquí, desde donde está tirada la foto. La tele en el mismo sitio. La puerta del fondo a la izquierda creo que no se podía abrir. En el entrante de la pared de la izquierda había un baño y un escobero. Más a la izquierda, y fuera de la foto, había unas escaleras para subir al piso de arriba. Del salón tengo mogollón de recuerdos, algunos de ellos tenebrosos xD

Salón II
Ah, coño, si había otra foto del salón... Pues ahí a la derecha, de más cerca a más lejos, se ve la puerta inútil, la del baño, el escobero y el hueco de las escaleras. A la izquierda está la puerta que llevaba a la cocina y a la calle. Recuerdos mil.

Cocina
El primer recuerdo de la cocina es el del intento de sangría que hicimos cuando llegamos, con más espuma que un capuccino. Otra noche nos atrevimos con agua de Valencia :) Y por supuesto, no pueden faltar los míticos espaguetis de mi amiga, que hizo 2 kilos para 6, no vaya a ser que falte, y al final hubo que tirar casi todo y llamar a los geos para que los despegaran de la olla. Sin embargo, gracias a aquellos espaguetis conseguí que mis amigos probaran la cebolla picadita en la pasta, ¡y les encantó!

Habitación de las chicas
No sé de que me hablas... yo allí ni pasé. Me había dicho mi mamá que las chicas son muy malas y yo me mantuve alejado de ellas en todo momento.


Habitación de los chicos
El único recuerdo que tengo de este cuarto es a los tres chicos amontonados en una de las camas y haciendo el tonto. Yo estaba arriba del todo ;)

Y bueno... la experiencia inolvidable. Si algún día tengo ganas ya buscaré más fotos y contaré más cosas de ésta casa o de alguna de las otras, que sé que os mola cotillear en la vida ajena :P

¡Besitos!

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